Del autor número uno en ventas del New York Times y USA Today de Cosas que dejamos atrás
La novia es una muñeca. El novio es el perfecto caballero. ¿Pero el resto de la fiesta de bodas? Son materia de pesadillas. ¿Rico? Controlar. ¿Insípido? Doble verificación. ¿Con derecho? No hay suficientes controles en el mundo. ¿Y el padrino? Más bien el peor hombre.
Pero la dama de honor Franchesca Baranski se toma en serio sus deberes. ¿Novio secuestrado? Ella tiene esto. ¿Asistentes groseros? Simplemente mírala manejarlos. Entonces, ¿un padrino con una gran actitud y una chequera aún más grande? Sí, no hay manera de que ella permita que ese imbécil pretencioso y crítico arruine la boda de su mejor amiga. No importa lo sexy que sea. (Bueno, ese es el plan de todos modos...)
Aiden Kilbourn no mantiene relaciones a largo plazo. Está ocupado gobernando el mundo de los negocios y todavía tiene que encontrar una mujer que pueda tolerar durante más de un mes, dos como máximo. Conquistar lo invencible es básicamente su pan de cada día. Y no ha afrontado un desafío que no pueda ganar. ¿Pero Franchesca Baranski? Esta chica inteligente de Brooklyn puede ser su perdición.
IDIOMA ORIGINAL
From the #1 New York Times and USA Today bestselling author of Things We Left Behind
The bride is a doll. The groom is the perfect gentleman. But the rest of the wedding party? They're the stuff of nightmares. Rich? Check. Vapid? Double Check. Entitled? Not enough checks in the world. And the Best Man? More like the Worst Man.
But Maid of Honor Franchesca Baranski takes her duties seriously. Kidnapped groom? She's got this. Rude attendees? You just watch her handle them. So a Best Man with a big attitude and an even bigger...checkbook? Yeah, there's no way she's going to let that pretentious, judgmental jackhole ruin her best friend's wedding. No matter how sexy he is. (Well, that's the plan anyway...)
Aiden Kilbourn doesn't do long-term relationships. He's busy ruling the business world, and has yet to find a woman he can tolerate for longer than a month, two at the outside. Conquering the unconquerable is basically his bread and butter. And he hasn't met a challenge that he can't win. But Franchesca Baranski? This smart-mouthed girl from Brooklyn may just be his downfall.
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