Un delincuente tiene que hacer lo que tiene que hacer ... en la otra vida.
Yusuke Urameshi era un delincuente adolescente duro hasta que un acto desinteresado cambió su vida ... al ponerle fin. Cuando murió salvando a un niño pequeño de un automóvil a toda velocidad, la otra vida no sabía qué hacer con él, por lo que le dio una segunda oportunidad en la vida. Ahora, Yusuke es un fantasma con una misión, que realiza buenas acciones a instancias de Botan, la barquera del río Estigia, y Koenma, el juez de los muertos que chupa el chupete.
El Dr. Las armas biológicas definitivas de Ichigaki están en el ring, pero el Equipo Urameshi de repente está sufriendo un severo ataque de conciencia. Después de la ensoñación esclarecedora de Kuwabara sobre cómo el Dr. Ichigaki implantó nodos esclavistas de sangre en los cerebros de los estudiantes de artes marciales del Maestro Mitamura, Yusuke y compañía simplemente no tienen el corazón para llevar a cabo su negocio de matar demonios como de costumbre.
< p> Mientras tanto, los Shadow Channelers, los ninjas del Demon Plane, están en cubierta. Con su diabólica adrenalina al máximo, el Equipo Urameshi rezará para que Yukina, la Doncella de Hielo, que vino a ver, resulte ser su amuleto de la suerte.IDIOMA ORIGINAL
A delinquent’s gotta do what he’s gotta do…in the afterlife.
Yusuke Urameshi was a tough teen delinquent until one selfless act changed his life...by ending it. When he died saving a little kid from a speeding car, the afterlife didn't know what to do with him, so it gave him a second chance at life. Now, Yusuke is a ghost with a mission, performing good deeds at the behest of Botan, the ferrywoman of the River Styx, and Koenma, the pacifier-sucking judge of the dead.
Dr. Ichigaki's ultimate biological weapons are in the ring, but Team Urameshi is suddenly having a severe attack of conscience. After Kuwabara's enlightening reverie about how Dr. Ichigaki implanted blood-slaver nodes in the brains of Master Mitamura's martial-arts students, Yusuke and company just don't have the heart to conduct their demon-slaying business as usual.
Meanwhile, the Shadow Channelers--the ninjas of the Demon Plane--are on deck. With their fiendish adrenaline pumped up to the max, Team Urameshi better pray that Yukina the Ice Maiden, who came to watch, turns out to be their lucky charm.
Interés
