No. El último thriller legal del autor más vendido John Grisham te lleva al interior de un bufete de abogados que se encuentra en un terreno inestable.
"[Un] thriller alegre y travieso. . . Grisham escribe con un espíritu tan inventivo. . . . Un placer. ”- Janet Maslin, The New York Times
Mark, Todd y Zola llegaron a la facultad de derecho para cambiar el mundo, para hacerlo un lugar mejor. Pero ahora, como estudiantes de tercer año, estos amigos cercanos se dan cuenta de que han sido engañados. Todos pidieron mucho dinero prestado para asistir a una facultad de derecho con fines de lucro de tercer nivel tan mediocre que sus graduados rara vez aprueban el examen de la abogacía, y mucho menos consiguen buenos trabajos. Y cuando se enteran de que su escuela pertenece a una cadena propiedad de un turbio operador de fondos de cobertura de Nueva York que también es dueño de un banco especializado en préstamos para estudiantes, los tres saben que han sido atrapados en la estafa de la Gran Facultad de Derecho. < / p>
Pero tal vez haya una salida. Tal vez haya una forma de escapar de su aplastante deuda, exponer al banco y la estafa, y ganar unos cuantos dólares en el proceso. Pero para hacerlo, primero tendrían que dejar la escuela. Y dejar la facultad de derecho unos pocos meses antes de la graduación sería una locura, ¿verdad? Bueno, sí y no. . .
Levanta un taburete, toma uno frío y prepárate para pasar un rato en The Rooster Bar.
IDIOMA ORIGINAL
No. 1 bestselling author John Grisham’s newest legal thriller takes you inside a law firm that’s on shaky ground.
“[A] buoyant, mischievous thriller . . . Grisham writes in such an inventive spirit. . . . A treat.”—Janet Maslin, The New York Times
Mark, Todd, and Zola came to law school to change the world, to make it a better place. But now, as third-year students, these close friends realize they have been duped. They all borrowed heavily to attend a third-tier for-profit law school so mediocre that its graduates rarely pass the bar exam, let alone get good jobs. And when they learn that their school is one of a chain owned by a shady New York hedge-fund operator who also happens to own a bank specializing in student loans, the three know they have been caught up in The Great Law School Scam.
But maybe there’s a way out. Maybe there’s a way to escape their crushing debt, expose the bank and the scam, and make a few bucks in the process. But to do so, they would first have to quit school. And leaving law school a few short months before graduation would be completely crazy, right? Well, yes and no . . .
Pull up a stool, grab a cold one, and get ready to spend some time at The Rooster Bar.
Interés
