¡Lisa Kleypas está de regreso con un nuevo y sorprendente romance histórico!
Los lectores han esperado durante mucho tiempo el regreso de la autora más vendida del New York Times, Lisa Kleypas, al romance histórico, y ahora está de regreso con el más impresionante hasta ahora.
Un giro del destino. . .
Devon Ravenel, el libertino más perversamente encantador de Londres, acaba de heredar un condado. Pero su poderoso nuevo rango en la sociedad conlleva responsabilidades no deseadas. . . y más que algunas sorpresas. Su propiedad está cargada de deudas, y las tres hermanas inocentes del difunto conde todavía ocupan la casa. . . junto con Kathleen, Lady Trenear, una hermosa joven viuda cuyo agudo ingenio y determinación son compatibles con los de Devon.
Un choque de voluntades. . .
Kathleen sabe que no debe confiar en un sinvergüenza despiadado como Devon. Pero la ardiente atracción entre ellos es imposible de negar, y desde el primer momento en que Devon la sostiene en sus brazos, jura hacer lo que sea necesario para poseerla. Mientras Kathleen se encuentra cediendo a su seducción hábilmente erótica, solo queda una pregunta:
¿Puede evitar entregar su corazón al hombre más peligroso que haya conocido?
IDIOMA ORIGINAL
Lisa Kleypas is back with a stunning new historical romance!
Readers have long waited for the return of New York Times bestselling author Lisa Kleypas to historical romance—and now she's back with her most breathtaking yet.
A twist of fate . . .
Devon Ravenel, London's most wickedly charming rake, has just inherited an earldom. But his powerful new rank in society comes with unwanted responsibilities . . . and more than a few surprises. His estate is saddled with debt, and the late earl's three innocent sisters are still occupying the house . . . along with Kathleen, Lady Trenear, a beautiful young widow whose sharp wit and determination are a match for Devon's own.
A clash of wills . . .
Kathleen knows better than to trust a ruthless scoundrel like Devon. But the fiery attraction between them is impossible to deny—and from the first moment Devon holds her in his arms, he vows to do whatever it takes to possess her. As Kathleen finds herself yielding to his skillfully erotic seduction, only one question remains:
Can she keep from surrendering her heart to the most dangerous man she's ever known?
Interés
