Ingeniosa, divertida e inteligente, una novela con intriga política, amor y guerra en una época determinante para Centroamérica, La Campaña Nacional de 1856-1857 en Costa Rica. Julio de 1855: el filibustero William Walker llega a una Nicaragua en guerra civil con la promesa de con-tribuir al triunfo de una de las dos facciones, pero con su mente puesta en lo que pensaba era el destino de su vida: apoderarse del país, extender su dominio al resto de la joven Centroamérica e imponer la esclavitud, en consonancia con los ideales de los estados del Sur de Norteamérica. Su arma estratégica es la Vía del Tránsito, la única ruta interoceánica del continente en aquel momento, de la cual se apodera para mantener un flujo permanente de hombres y armas. Mientras tanto, en la pacífica y próspera Costa Rica, el presidente Juan Rafael Mora es capaz de leer la amenaza que se cierne sobre el naciente Estado y marcha hacia Nicaragua con un ejército de campesinos descalzos, a enfrentar al enemigo en su propio reducto. A esta descomunal batalla se unirán luego los demás países centroamericanos. Es el inicio de una historia de muerte y dolor sin límites, pero también de amor por la libertad y de heroísmo que marcará para siempre la historia de las cinco naciones del istmo.
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